Los cuadros son elementos que dan mucha personalidad a las paredes y otorgan un estilo especial al ambiente. A la hora de elegir cuál es el adecuado hay que tener en cuenta ciertos detalles como los colores, la forma, el diseño y el tamaño.

La elección del cuadro debe complementar la decoración existente.

Ya sea en una sala de estar, dormitorio, oficina o cualquier otro espacio, los cuadros pueden transformar la atmósfera de manera sorprendente. Desde paisajes tranquilos hasta abstractos vibrantes, hay una amplia variedad de estilos disponibles para adaptarse a tus preferencias.

El blanco y negro nunca falla.

Los cuadros decorativos pueden ayudar a abrir un espacio visualmente y agregar profundidad a una habitación. Te recomendamos optar por piezas que creen la ilusión de espacio, como paisajes con perspectiva o fotografías en blanco y negro.

Un dormitorio tranquilo con colores beige y diseño sencillo.

Siempre es mejor medir el espacio disponible en la pared donde querés colocar el cuadro, ya que, si es demasiado grande puede abrumar la habitación, mientras que uno demasiado pequeño puede perderse en la pared.

Si todavía no estás seguro de cuál sería tu cuadro ideal, no te preocupes. A continuación te dejamos un catálogo para descubrir una amplia selección de opciones que seguro te encantarán.

Un cuadro lleno de colores para dar energía al espacio.


El catálogo está meticulosamente estructurado por ambientes. Dentro encontrarás opciones para dormitorios juveniles, cocinas, salas y comedores. Si no estás seguro de qué colocar en cada espacio, esta guía te será de gran ayuda.